En el marco del 9º Encuentro de Muralismo, se reunieron en el Concejo Deliberante autoridades, artistas y público interesado en un Foro donde se trató la ley de Museo Abierto.
En el marco del 9º Encuentro de Muralismo, se reunieron en el Concejo Deliberante autoridades, artistas y público interesado en un Foro donde se trató la ley de Museo Abierto.
El encuentro se desarrolla desde el 1 y hasta el 7 de octubre, con intervenciones en los muros de las inmediaciones del Hipódromo de Mendoza.
Desde el año 2009 el departamento de Godoy Cruz lleva a cabo estos encuentros que han dejado como resultado más de 380 murales, siendo considerada nuestra ciudad como “Museo a Cielo abierto” según la ordenanza 6119/12.
Este año, aprovechando la gran convocatoria, se realizó un Foro Abierto con la participación del Presidente del Concejo Deliberante, César Cattáneo, concejales, el Director de Cultura, Claudio Fragapane y el responsable del Patrimonio Municipal, Guido García, además de los artistas que participan del encuentro. Allí, se discutió la profundización de dicha ordenanza en el sentido de que tanto los espacios públicos como los pintores tengan mayores garantías ante el desarrollo urbanístico.
Se encuentran participando más de 65 artistas que realizarán 35 murales, que conviven e intercambian experiencias durante esta semana con el firme propósito de dar vida a los muros y a los espacios públicos, cargándolos de estética y contenido, mediante el arte.
La experiencia del muralismo y el arte urbano es la manera directa de acercar la cultura y el arte para que dialogue con la gente, por lo que se considera al encuentro como parte fundamental de las actividades anuales que el municipio realiza en materia Artística y Patrimonial.
LOS MENSAJES EN LOS MUROS
Los mensajes expresados en los muros son, temáticas de interés social,
Medio Ambiente-No a la Minería, Cuidado del agua, Pueblos originarios, Vivienda Digna, Escritores Latinoamericanos, Cine argentino, entre otros.
Este año la temática será “Ciudades Educadoras”, basada en la Declaración Universal de Derechos Humanos, y la “Carta de Ciudades Educadoras firmada en Barcelona en 1990. Se parte del convencimiento que la educación de los ciudadanos no puede dejarse al azar. La ciudad educadora ha de ejercitar y desarrollar esta función paralelamente a las tradicionales (económica, social, política y de prestación de servicios), con la mira puesta en la formación, promoción y desarrollo de todos sus habitantes. Las ciudades, desde su dimensión local, cumplen un rol fundamental en la consolidación de una ciudadanía democrática plena, promotor de una convivencia pacífica mediante la formación en valores éticos y cívicos, el respeto a la pluralidad de las diversas formas posibles de gobierno y el estímulo de unos mecanismos representativos y participativos de calidad.